Los rizomas, de hasta 1 cm. de espesor, crecen tanto horizontalmente como verticalmente. Los primeros, gracias a la presencia en la parte inferior de raÃces lignificadas de hasta 15 cm de largo, anclan la planta al sustrato. Los segundos, que aumentan la altura, tienen la función de combatir el enarenamiento debido a la continua sedimentación.
Los dos tipos de crecimiento dan lugar a la denominada "mata", una formación en terraza que consiste en un entramado de estratos de rizomas, raÃces y sedimentos atrapados. De esta forma, las posidonias colonizan un entorno que difÃcilmente podrÃan ocupar las algas debido a la falta de raÃces.
La reproducción asexual por estolones, que permite la expansión de las praderas, se realiza mediante los rizomas plagiótropos, que crecen cerca de 7 centÃmetros al año y colonizan nuevos espacios. La alta acumulación de sedimentos y la reducción del espacio disponible para el crecimiento horizontal estimula el crecimiento vertical de los rizomas, formando asà las matas.
El crecimiento vertical de los rizomas lleva a la formación de una estructura llamada "mata", que consta de un entramado de raÃces y rizomas muertos entre los cuales queda atrapado el sedimento. Sólo la parte superior de estas estructuras está formada por plantas vivas. La formación de mata depende en gran medida de los ritmos de sedimentación (una alta velocidad de sedimentación puede dar lugar a un excesivo enarenamiento de los rizomas y por tanto a su asfixia; por el contrario, una sedimentación demasiado lenta puede conducir a que los rizomas se desprendan y por tanto, a la regresión de la pradera). Dado que la velocidad de descomposición de los rizomas es muy lenta, pueden permanecer dentro de la mata incluso durante milenios. La mata tiene una tasa de crecimiento muy lenta, estimada en alrededor de 1 metro por siglo.